Uso Pasivo de las Energías Ambientales.
Podemos entender que los edificios intercambian energía térmica
(calor-frió) con el entorno que les rodea, con los edificios que comparten
medianeras o con las fachadas y cubiertas en contacto con el medioambiente así
como con el terreno sobre el que se sustenta, este proceso se realiza desde el
foco caliente hacia el foco frío de manera natural.
Así pues los elementos ambientales que intervienen en este
mecanismo natural de intercambio de energía con el edificio son: la atmósfera y
el terreno, donde los elementos del cerramiento actúan como intercambiadores.
El diseño arquitectónico energéticamente consciente está ligado al
aprovechamiento de los recursos naturales del emplazamiento donde levanta el edificio:
la energía solar activa y pasiva, el viento, la temperatura ambiente, la
humedad, la orientación, la vegetación, etc…